viernes, 1 de junio de 2012

Te perdí.

Me asomo a la ventana pensando en qué estarás haciendo ahora. Miro la luna y las estrellas y me relajo entre el sonido de los árboles con los que chocan la suave brisa de la noche.
Me encantaría tenerte entre mis brazos esta noche tan preciosa, escuchando esta canción que tanto nos gusta a los dos.
Quisiera haber sido yo la única chica de tus ojos, sé que la que te tenga tiene mucha suerte, porque puedes hacer y sentir feliz a cualquier persona que esté cerca de ti.
Ahora cada vez pasamos más el uno del otro y me duele, pero así son las cosas, tú con tu vida y yo con la mía.
Esta noche se vuelve gris y ya no es tan bonita porque tú no estás.
Los dos hemos cambiado, ya no es lo mismo, no nos contamos practicamente nada, ni siquiera sé porque a veces me sigues saludando y te preocupas algo mínimo por mi.
Ya nada tiene sentido, todo es diferente, nuestras miradas, los dulces roces de tus manos sobre las mías, tus consejos...
Me encantaría no perderte nunca como amigo, pero de verdad siento... que ya te perdí.